LA EDUCACIÓN VIRTUAL Y LOS NUEVOS ROLES DE ACTUACIÓN DOCENTE

En la literatura sobre temas de educación virtual se suele con frecuencia dar énfasis a los aspectos técnicos y teóricos que la sustentan como tal y se deja por fuera aspectos fundamentales inherentes a la educación, necesarios para la comprensión a fondo de la nueva modalidad de educación.

Los foros temáticos en la Internet son una muestra de esta tendencia. Es importante reflexionar sobre temas como los modelos pedagógicos y los roles que en ellos tienen estudiantes y profesores, además de los esquemas mentales de profesores y alumnos, los cuales pueden resultar en serios obstáculos para el éxito de un proyecto de educación virtual. En este contexto, conviene preguntarnos: ¿La educación virtual trata de prescindir de la presencia física de los actores pedagógicos en educación, o tiene otros alcances?

La educación virtual de ninguna manera implica como condición necesaria prescindir de la presencia física de los actores pedagógicos en educación. Sin embargo, esa es la idea que muchas personas manejan como reacción al cambio. La Educación virtual con todo su conjunto de medios técnicos podría presentarse como una presunta amenaza para los profesores de la modalidad presencial.

La educación virtual implica varias dimensiones de análisis. En primer lugar no se trata de prescindir de los profesores. Todo lo contrario. La educación virtual implica la necesaria presencia de los educadores. Los estudiantes se relacionan e interactúan más con sus profesores virtuales que con sus profesores presenciales debido precisamente a las posibilidades de interacción asincrónica a través de foros, blogs, páginas web o correo electrónico. En contraste, el alto número de estudiantes por aula en los cursos presenciales, limita ampliamente la interacción sincrónica con los profesores. No todos los estudiantes pueden participar. Si todos los cuarenta estudiantes pudieran hablar durante dos minutos, entonces se consumiría el tiempo de la clase que en general es de noventa minutos y el profesor no podría desarrollar su proceso.

A nivel de la interacción entre los estudiantes, las posibilidades de contacto asincrónico y desterritorializado posibilita mayor contacto entre ellos sobre todo en el trabajo colaborativo a través foros, blogs, páginas web, sistemas de gestión de aprendizaje o correo electrónico. Por supuesto, la interacción sincrónica a través de los chats también ayuda a mantener los lazos afectivos y académicos entre los alumnos.

No obstante lo anterior, el tránsito hacia la educación virtual exige toda una revisión de los roles y modelos pedagógicos empleados en la educación presencial debido a que la educación virtual implica algo más que la mediación tecnológica. Por ejemplo, la presentación de contenidos a través de la Internet no puede ser de igual forma que en la educación presencial. La Internet exige otra forma de presentar la información. No es lo mismo escribir para ser leído en papel que escribir para ser leído en una pagina web. Al respecto, Nielsen (1997) plantea que para publicar en la web se debe ser sucinto, es decir escribir 50% menos texto de lo que se escribiría para ser leído en papel. Recomienda también utilizar hipervínculos para dividir información extensa en varias páginas. Adicionalmente, considero que el profesor virtual debe tener conocimientos básicos de diseño gráfico para que pueda crear páginas y objetos de aprendizaje en donde texto, imágenes y colores se combinen armoniosamente y estimulen a los lectores.

Se comprende entonces que la educación virtual no amenaza con la desaparición de los profesores sino que les impone un cambio de roles y unos desafíos de formación.

En cuanto al estudiante, la educación virtual exige que cambie los roles pasivos que les ha impuesto el paradigma de educación tradicional. Debe dejar de ser un receptor pasivo de información para llegar a ser un sujeto activo, motor de su propia formación para así poder aprovechar al máximo las amplias posibilidades de acceso al conocimiento que le brindan las TICs. Deben los estudiantes esmerarse en mejorar su capacidad para leer en forma crítica y analítica ya que la interacción social y con el conocimiento a través de las TICS está mediada por lectura y la escritura (Mockus, 1996).

Para concluir temporalmente la discusión sobre este tema, la educación virtual no consiste solamente en una serie de medios sorprendentes de interacción. La educación virtual, para cumplir con sus propósitos demanda una revisión de los modelos pedagógicos y una capacitación de los docentes y estudiantes en nuevos paradigmas educativos que sean coherentes con los propósitos de esta nueva modalidad de educación. La formación tecnológica, que es necesaria, debe relacionarse coherentemente con la dimensión pedagógica del docente.

BIBLIOGRAFÍA:

Burgos, Daniel. El público es distinto, el sistema es distinto, el soporte es distinto. ¿Por qué deberían ser iguales los contenidos y la forma de exponerlos? En línea: http://www.educaweb.com/esp/servicios/monografico/formvirt/opinion10.asp (Consulta: 31 de marzo de 2008).

MOCKUS, Antanas y otros. “¿Informática sin escritura? El problema para la educación”. En: Los procesos de la escritura. Santafé de Bogotá: Magisterio, Mesa Redonda, 35, 1996, p.p. 25 - 51.

¿Educación virtual o presencial? Online:
http://www.comfama.com/contenidos/noticarteleras/20030704/virtualopresen... (Consulta: enero de 2005)

Nielsen, Jacob (1997). Be succint: writing for the web. Online: http://www.useit.com/alertbox/9703b.html (Consulta: marzo 22 de 2005).