MEJOR CEDERRÓN QUE CIDÍ
Por: Orlando Cárcamo Berrío
Con frecuencia me corrigen cuando digo “compré un devedé de juegos” o “me regalaron un cederrón de música clásica”. La corrección enfatiza la pronunciación correcta de esas palabras en inglés. Se me invita a pronunciar “dividí” las siglas DVD y “cidí”, las siglas CD. Mi respuesta es un poco irónica: “Entonces, conversemos en inglés”. Y continúo la conversación en inglés.
Los latinos, por el sincretismo racial que nos caracteriza, tenemos el corazón abierto a lo que viene del exterior sea ello cultural, lingüístico o tecnológico, al extremo de poner en riesgo nuestra propia identidad.
A muchos hispanohablantes les produce sensación de prestigio utilizar ciertas palabras y pronunciarlas como se pronuncian y escriben en inglés. Son numerosos los casos, especialmente las palabras relacionadas con las nuevas tecnologías: CD (“sidí”), DVD (“dividí”), VCD (“visidí”), entre otras. ¿Por qué se prefiere decir Video Beam (“video bim”) en lugar de proyector?
Los hablantes nativos de inglés no son tan generosos al pronunciar las palabras españolas. Pronuncian los nombres hispanos en la forma como leen las palabras de su idioma. Para pronunciar Los Angeles, dicen “los ányeles”; La Habana, “javana”; Panamá, “pánama”, etc. Para proteger la cultura y lengua de los Estado Unidos ha habido iniciativas legales en ese país tendientes a detener la expansión del español. En el estado de California en 1998, por voto popular ganó una propuesta legal, Proposición 227, para prohibir la enseñanza del español en las escuelas de ese estado fronterizo con México. Otro caso, la campaña titulada “English Only” o “Sólo inglés”, es responsable de numerosos despidos de latinos por el solo pecado de hablar español en el lugar de trabajo. Solamente en el 2004 se presentaron 155 casos de denuncias por atropellos contra hispanohablantes derivados de la aplicación de la política de “Sólo inglés”.
Nuestra lengua tiene todas las palabras correspondientes a las innovaciones tecnológicas y cuando no tiene equivalentes entonces provee los mecanismos lingüísticos para realizar la respectiva adaptación. La Real Academia Española, mediante el Diccionario Panhispánico de Dudas plantea que, en lugar de CD-Rom, se debe decir y escribir cederrón, disco compacto o sencillamente cedé (plural cedés); aunque se permite la palabra equivalente devedé, se puede en español escribir la sigla DVD y pronunciarse como deuvedé (en España) o devedé (en Latinoamérica); de igual forma, se puede escribir la sigla VCD y pronunciarla como vecedé. La utilización en español de una palabra extrajera con la pronunciación y escritura de la lengua de origen –aun cuando existe su equivalente en castellano- es conocida como barbarismo. Son barbarismos: marketing, amateur, diskette, entre otros.
Finalmente, no se tratade que los latinos reaccionemos a la influencia del inglés de igual forma que algunos funcionarios del gobierno de los Estados Unidos.Se trata de que hablemos bien nuestra lengua española por respeto a nuestra tradición cultural y pronunciemos las palabras y nombres extranjeros con los recursos fonéticos y semánticos que nos brinda el español.